Azul celeste con unas pinceladas de blanco y negro o negro y blanco...así comenzó alguien a pintar su vida, con colores no intensos, pero si rotundos, igual de rotundos que son algunos momentos que nos toca vivir...Alguna vez de niños soñamos con el futuro, grandes planes, hermosos sueños que esperamos se cumplan...

Alguien dibujó corazones alrededor de un gran sol.

Hubo también quien dibujo algún corazón roto.

Y la soledad, ¡qué bien se nos da dibujar la soledad!

¿Qué color poner a una vida solitaria?.

Tantos momentos que vivimos, tantas alegrías rotas, ¿qué color poner a la tristeza?

Todos deberíamos de poner un color a nuestros estados de ánimo...

Tanta ternura echada a perder, ¿qué color debe tener la ternura?...

Pincelada tras pincelada un cuadro casi abstracto, casi real, casi mágico va naciendo,

nacer, vivir, morir...¿qué color poner a un nacimiento...¿qué color poner a la perdida de alguien para siempre?...

Tantas pinceladas y tan pocos momentos para poder terminar el gran cuadro de nuestra vida...