Castillo de Olite. Navarra.

Si hemos de citar una muestra de la arquitectura y de la historia del viejo reino de Navarra, tenemos que acercarnos al pueblo de Olite y su castillo, inicialmente Palacio Real.

Construido entre los siglos XIII y XIV, sufrió un fuerte deterioro a lo largo del siglo XVI, de modo que permaneció abandonado hasta el siglo XIX. Durante la Guerra de la Independencia fue escenario de escaramuzas bélicas, allá por el año 1813.

Fue en el año 1923 cuando la Diputación de Navarra aprobó unas obras de rehabilitación que se iniciaron en 1937 y, en realidad, no concluyeron plenamente. Si bien el conjunto de este Palacio-Castillo presenta en la actualidad un excelente aspecto, al menos en su obra exterior.

El interior de este inmenso edificio medieval está repleto de escaleras angostas, galerías y pasadizos que hacen a veces dificil el tránsito cuando la presencia de turistas es elevada. Las vistas desde las altas torres, en especial desde la central, visible en la imagen, son espectaculares y abarcan grandes extensiones del sur de Navarra.

Muy cerca de ahi se encuentra el Parador Nacional de Olite, establecimiento donde somos atendidos a cuerpo de rey, tanto en el alojamiento como en los servicios de restaurante.

Visita muy recomendada, a poder ser en época tranquila, a fin de contemplar este viejo reducto medieval, degustar su cocina y sus vinos y acercarnos, por ejemplo, hasta el Monasterio de la Oliva.

Muchísimas gracias a todos los amigos de ipernity.

Muy cordiales saludos de Karmele y Eduardo.